viernes, 21 de septiembre de 2012

Rota...

Pensé que sería otra más. Otra vez más que, después de caerme, haciendo un duro esfuerzo me levantaría y poco a poco (muy poco a poco, que para eso una es lenta) volvería a ser yo y que LA ILUSIÓN, MI ILUSIÓN, volvería a estar ahí, a la espera...

Pues no. No sé si es porque ya van más veces de las soportables por mi ser o porque simplemente esta vez era definitiva, pero lo cierto es que esta vez estoy rota. No lo he estado antes. He estado muy mal, hundida en lo más profundo de la oscuridad, pero no rota... solo profundamente herida.

Se me ha roto el alma y llevo meses intentando repararla sin éxito. Esta vez el impacto ha sido tan brutal que tengo la sensación, la intuición de que LA ILUSIÓN no volverá. Y lo peor es que no sé vivir (ni quiero) sin esa ilusión, sin esa posibilidad, sabiendo que ya nunca llegará...

Mi única solución sería utilizar el LOCTITE de mi alma, pero está descatalogado y fuera del mercado para mí... Conclusión: no hay solución...

3 comentarios:

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

"Es normal sentirse así" y te pido disculpas porque sé que odiarás esa frase; sin dudas pensarás "¿que sabe de sufrimiento este tipo?". Seguramente no sé de un sufrimiento exactamente igual al tuyo, por la sencilla razón que no soy vos. Sólo vos sabés de tu sufrimiento personal, pero deberás saber que no es el último, ni el más grande, perdón por la mala nueva.
Sin saber nada de tu vida, imagino que tu sufrimiento tiene que ver con no tener lo que deseás en este momento. Son deseos del ego estimada, y tan falsos como el ego en sí mismo.
Fuerza y besos, lo mejor está por venir

Miranda dijo...

Gracias... Es lo único que puedo decir